By Maria Cristina Diaz, Profesora Investigadora Asociada - Harbor Branch Oceanographic Institute at Florida Atlantic University
Linnet Busutil, Investigadora y Jefa del Departamento de Benthos - Instituto de Ciencias Marinas (ICIMAR-CITMA)
25 de mayo de 2017
Mientras continuamos nuestra navegación, observaciones, y recolecciones en arrecifes cubanos, nos reunimos dos veces al día, primero a las 8:00am y luego a las 2:00pm. El piloto del ROV (Vehículo No Tripulado, según sus siglas en inglés) y los científicos, así como un experto cubano y uno de Estados Unidos, se sientan en parejas, y allí exploramos la zona oscura de los arrecifes cubanos.
Cuando las corrientes del Cabo de San Antonio, el punto más occidental de Cuba, se hicieron demasiado fuertes para que el ROV pudiera sumergirse, tuvimos que movernos al norte para evitarlas. Esa inmersión tuvo lugar a las 11:00am, frente al faro Rocali. La inmersión del ROV usualmente comienza entre los 150 y 190 metros. En estas profundidades generalmente encontramos un desierto de arena, siempre con una “capa fina amarillo fluorescente” que no hemos podido recolectar, pero que nos da la bienvenida. ¡No en el Cabo de San Antonio!
En su lugar, fuimos recibidos a 170 metros de profundidad por una “fiesta de esponjas”. Muchas de las especies que hemos visto a 100 o 125 metros las encontramos allí, desafiando el abismo, en tamaños más pequeños, pero ahí estaban. No obstante, esta no fue nuestra única sorpresa. Antes de sumergirnos, pedimos a Stephanie Farrington buscar en la Base de Datos una lista de todas las especies de esponjas que habíamos registrado durante la expedición. Quedamos asombrados con la diversidad, pero no teníamos idea de cuántas cosas diferentes habíamos descubierto. Le dimos un nombre a cada esponja bien identificada, y para nuestra sorpresa tenemos ya 100 especies diferentes, la mayoría de ellas con un nombre genérico asignado. Sabemos que este es un cálculo muy por debajo de la realidad, ya que hemos identificado al menos 5 Petrosiidae y 10 Demospongiae diferentes, además de estas 100 especies. Luego de la inmersión en el Cabo de San Antonio, 10 nuevas especies fueron añadidas a la Base de Datos.
He aquí algunas de las cosas más sorprendentes que hemos observado en las comunidades de esponjas de estos arrecifes mesofóticos cubanos:
Estos patrones serán estudiados posteriormente por Linnet Busutil en la investigación para su doctorado. Definitivamente, los arrecifes mesofóticos cubanos son refugios o centros de origen, almacenan la mayor diversidad y biomasa de esponjas del Caribe.